Eurovisión 2025 ya está en marcha desde Basilea, Suiza, con una producción deslumbrante y actuaciones que apuntan a una de las ediciones más competitivas de los últimos años. España, representada por la cantante Melody, ha generado muchas expectativas con su canción “Esa Diva”, un homenaje teatral y visual al poder de la transformación artística.
Una puesta en escena pensada para impactar
Melody no ha escatimado en recursos escénicos. Su actuación, dividida en tres actos claramente definidos, comienza con una estética flamenca oscura, evoluciona hacia una narrativa pop sobre una alfombra LED animada y finaliza con un momento brillante en el que viste un mono plateado con más de 15.000 cristales incrustados. Esta narrativa visual acompaña a la letra de «Esa Diva», que habla de renacer, empoderarse y dominar el escenario con identidad propia.
La dirección artística del número está a cargo de Mario Ruiz, conocido por su trabajo en el Benidorm Fest y en producciones musicales teatrales. Aunque la puesta en escena ha sido bien recibida en los ensayos por la prensa acreditada, algunos medios europeos han señalado que, si bien es elegante, podría no ser lo suficientemente rompedor como para destacar entre propuestas más vanguardistas o emocionalmente potentes.
¿Quién es Melody y por qué representa a España?
Melody, cuyo nombre real es Melody Ruíz, fue una niña prodigio en la música española a principios de los años 2000. Su hit «El baile del gorila» la catapultó a la fama con apenas diez años. Más de dos décadas después, ha reconstruido su carrera apostando por la versatilidad musical, la técnica vocal y un estilo más maduro.
Ganó el Benidorm Fest 2025 con una combinación de votos del jurado profesional y el apoyo abrumador del televoto, donde fue la opción más votada. La canción, compuesta junto a Alberto Fuentes Lorite, mezcla sonidos electrónicos, elementos del folclore español y una base rítmica moderna. El mensaje es claro: reivindicar la fuerza femenina y la evolución personal sin pedir permiso.
Una edición marcada por la diversidad y el nivel técnico
Eurovisión 2025 ha reunido a 37 países participantes. Entre ellos, destacan como favoritos países como Suecia, Ucrania, Italia y Croacia, que han apostado por propuestas innovadoras en sonido y puesta en escena. Suecia, por ejemplo, presenta una balada intimista en sueco con un juego de luces envolvente, mientras Ucrania apuesta por una canción experimental con instrumentos tradicionales y coreografía contemporánea.
Este año se ha hecho especial hincapié en la sostenibilidad del evento. El escenario de Eurovisión 2025 en Basilea utiliza tecnología LED de bajo consumo, estructuras reciclables y un sistema logístico optimizado para reducir la huella de carbono. La realización de las semifinales ha sido elogiada por su precisión técnica y la fluidez del espectáculo, a pesar de la enorme complejidad que conlleva coordinar más de 30 delegaciones artísticas.
¿Qué papel juega España en las apuestas?
A diferencia de lo que ocurre con países tradicionalmente punteros, España no parte como favorita en las casas de apuestas. Al momento de la primera semifinal, Melody se sitúa entre los puestos 15 y 20 en las predicciones generales. Aunque esto podría parecer desalentador, es un dato que debe leerse con matices.
Históricamente, las apuestas han subestimado a algunas actuaciones que luego sorprenden en la final. Además, la opinión pública y el voto del público europeo pueden ser impredecibles. Las redes sociales muestran una reacción positiva al mensaje de la canción y al carisma escénico de Melody, aunque también se perciben comentarios que la sitúan como una propuesta «correcta, pero poco rompedora».
Lo cierto es que España ha optado por una candidatura coherente, bien producida y técnicamente sólida. La incertidumbre reside en si eso será suficiente para captar la atención del espectador europeo en una noche donde cada segundo de impacto visual y emocional cuenta.
¿Dónde ver Eurovisión 2025 y qué esperar de la final?
La gran final de Eurovisión 2025 tendrá lugar el sábado 17 de mayo a las 21:00 hora peninsular, retransmitida en directo por La 1 de RTVE y en la plataforma RTVE Play. Como parte del grupo “Big Five”, España tiene pase directo a la final sin necesidad de competir en semifinales, aunque ha presentado su actuación fuera de concurso para que el público europeo pueda conocerla de antemano.
En la final, cada país votará combinando el veredicto del jurado profesional y el televoto. Aquí es donde España podría ganar terreno si conecta emocionalmente con el público general, especialmente en países de habla hispana o con gran colonia hispana.
Un festival que va más allá de la música
Eurovisión no es solo un festival musical, sino un evento cultural que genera millones de conversaciones en redes, memes, análisis musicales, comparaciones políticas y movimientos sociales. En este contexto, la presencia de artistas como Melody refuerza la idea de que Eurovisión es también un escaparate para relanzar carreras, redefinir identidades y reivindicar raíces culturales sin renunciar a lo contemporáneo.
En esta edición, además, se ha notado un mayor enfoque en la inclusión y la diversidad. Varios países han presentado artistas queer, propuestas en lenguas minoritarias o referencias a culturas tradicionales. En ese mapa de identidad colectiva, la propuesta de España puede no ser la más extravagante, pero sí una de las más elegantes y profesionales del certamen.
Conclusión: España llega a Eurovisión 2025 con una artista consolidada, una canción potente y una puesta en escena pensada al detalle. ¿Será suficiente para conquistar Europa? El próximo sábado lo sabremos, cuando millones de personas voten por su actuación favorita. Pase lo que pase, Melody ya ha dejado huella.