El final del menú degustación en la alta cocina: un cambio de tendencia

El final del menú degustación en la alta cocina: un cambio de tendencia

Durante años, el menú degustación ha sido una de las máximas expresiones de la alta cocina, brindando a los comensales la oportunidad de explorar la creatividad de los chefs a través de largas secuencias de platos, que en ocasiones superan las cinco horas y llegan a 40 presentaciones distintas. Sin embargo, recientemente, tanto el sector como el público parecen mostrar signos de agotamiento ante este formato.

Chefs de renombre y críticos gastronómicos han comenzado a replantearse si este modelo responde a las actuales expectativas y preferencias de los comensales. Ahora, muchas personas prefieren cenas más cortas y centradas en una selección de platos cuidadosa, que eviten la saturación de sabores y el desgaste de pasar horas en un solo lugar. Este nuevo enfoque en la gastronomía responde a una demanda de experiencias más equilibradas y significativas, en las que se privilegia una conexión directa con los ingredientes y un disfrute más relajado de la velada.

Además, la tendencia hacia la sostenibilidad en la cocina impulsa un cambio hacia menos platos, evitando el desperdicio y valorando cada ingrediente en su máximo potencial. En lugar de impresionar con una interminable serie de presentaciones, muchos chefs optan por formatos más accesibles y concisos, permitiendo al comensal apreciar cada preparación sin distracciones.

Esta transformación señala un posible cambio de era en la gastronomía de alta gama, donde el menú degustación, aunque innovador en su momento, podría dar paso a experiencias más conscientes y satisfactorias, centradas en calidad y autenticidad.